Pues eso creo. Despúés del entreno de fuerza de ayer me he propuesto seguir descubriendo Collserola y la verdad es que la tarde ha salido redonda. He descbierto otras pistas perfectas para correr y para divertirse con la bici. Esta vez he ido por la parte más cercana a la carretera del cementerio de Cerdanyola y la verdad es que he venido encantado, eso es un paraiso para correr y no las trialeras por donde me metí el otro día, que miedo!
Además he metido dos horitas de carrera. He empezado con las piernas duras como piedras, tenía la musculatura muy agarrotada por las pesas de ayer. Iba cómodo y a pesar de todo me sentía fuerte aunque el agarrotamiento era fuerte. Lo mejor de todo es que además de llevar muy buenas sensaciones he metido más desnivel que nunca, unos 600 metros, las rampas las subía cómodo, sin llegar a plantearme andar para recuperar, iba sobrado, y encima a la hora de entreno me he empezado a notar más suelto de piernas y a los 90' iba como si estuviera totalmente descansado, con las mejores sensaciones. Sólo en alguna bajada fuerte notaba que los cuádriceps estaban sufriendo, el daño muscular las últimas 48 horas ha sido evidente. Ahora sólo queda recuperar bien para que todo esto sirva para algo!
No hay comentarios:
Publicar un comentario